martes, 21 de enero de 2020

ESQUEMA KANTIANO, Por Pedro Cazes Camarero (") para Vagos y Derecho



El concepto de ESQUEMA es posiblemente el más importante legado filosófico de Manuel Kant (cca. 1780 aprox). El esquema es un procedimiento de producción. 

Un esquema es siempre un producto de la imaginación, pero no es una “imagen” de la imaginación. La imaginación puede producir imágenes, pero no sólo imágenes. Entre otras cosas, también produce esquemas.

Según Kant, cada concepto que manejamos tiene una o más imágenes posibles. El esquema de un concepto es la “idea de un procedimiento universal de la imaginación, [procedimiento que] hace posible una imagen del concepto”. Notar que Kant dice: de la imaginación productiva (¡¡!! “Crítica del Juicio”). 

Martín Heidegger (1921) hace énfasis en que el concepto kantiano de esquema no sólo tiene un contenido epistemológico (o sea que es un dispositivo científico), sino que también es propio de las cosas (Kant las llama “fenómenos”), o sea que es ontológico. Hay esquemas en el pensamiento y hay esquemas en las cosas [El esquema sería así también el puente de inteligibilidad entre noúmeno y fainoúmeno, P.C.C.]. (Atención, Heidegger dice aquí “trascendencia” de las cosas, pero no en el sentido aristotélicotomista). 

Usando la terminología empleada por Kant, que aquí se entiende bien, la inteligencia humana, a diferencia de la razón abstracta y de la intuición de los sentidos, es capaz de captar el esquema de cada realidad individual, haciendo ésta inteligible, pero sin destruir a la vez su carácter concreto. 

Lo “real del mundo” no existe en lo que podríamos llamar su “fenomenalidad”, esto es, su apariencia; ni tampoco en una imaginaria “esencia abstracta” (como afirma el platonismo). Reside en su esquema, que es como su propio orden. El esquema es lo que Hegel, Marx (¡ y Luis Lea Place!) llaman un Universal Concreto. 

Hablando en lenguaje “deleuziano”, todo esquema posee varias “líneas de fuga”, que lo “des- territorializan”. Así que el esquema es una figura “inteligible” (esto es, pensable), y una figura concreta que se halla efectivamente en la realidad (Cfr. G. Deleuze, “Anti Edipo”). 

Por ejemplo: tomemos el dinero. Está pletórico de determinaciones, o sea que es concreto; pero posee líneas de fuga con cada ente comprable, o sea, en el capitalismo, todos los entes. Por lo tanto es un universal. El esquema del universal concreto del dinero se halla a la vez en la inteligencia y en el mundo real. Detrás del esquema del dinero existe otro esquema, el trabajo humano indeterminado. 

Se genera así una red ilimitada de esquemas existentes a la vez en el mundo y en la inteligencia, que exigen distintos marcos teóricos (tautologías) sobre los que se aplican potenciales cartografiados (de descripciones), o viceversa. Pero aquí ya nos alejamos de Kant.

15 de enero de 2020

(") Pedro Cazes Camarero, argentino, farmacéutico, 1945. Magister Scientiae en Metodología de la Investigación Científica y Epistemología. Ex director de "Estrella Roja" (órgano del Ejército Revolucionario del Pueblo- ERP-), "El Combatiente" (órgano del Partido Revolucionario de los Trabajadores - PRT-) y "Crisis". Autor de numerosos artículos y libros, entre ellos "Las Estrategias de la Aurora", de próxima aparición (Ed. Prometeo, Buenos Aires, 2019). Premio "Ramón Carrillo" (2010). Miembro del Encuentro de Profesionales contra la Tortura. Columnista de "Cuadernos de Crisis/Purochamuyo".

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